La leche de yegua puede ayudar a aliviar diversas alergias, incluida la alergia a la leche de vaca, la fiebre del heno y el asma. Su rica composición de probióticos, minerales y vitaminas ayuda a aumentar el sistema inmunológico, haciendo de la leche de yegua una alternativa para controlar las alergias.
Alergia a la leche de vaca
La alergia a la leche de vaca provoca molestias gastrointestinales, cutáneas y respiratorias. La leche de yegua puede ofrecer una solución a las personas que luchan contra este tipo de alergia. Aunque contiene más lactosa que la leche de vaca, la lactoferrina de la leche de yegua hace que sea más fácil de digerir. La lactoferrina es una proteína que también se encuentra en la leche materna y ayuda a promover el crecimiento de bacterias beneficiosas en el intestino. Si tienes intolerancia a la lactosa, debes tener precaución debido al mayor contenido de lactosa en la leche de yegua.
Fiebre del heno
La fiebre del heno, una alergia provocada por el polen de pastos, árboles y arbustos, puede causar síntomas como estornudos, picazón en los ojos y congestión nasal. La leche de yegua puede ayudar a controlar estos síntomas al favorecer una flora intestinal saludable y fortalecer el sistema inmunológico. Esto permite que el cuerpo responda mejor al polen, la principal causa de la fiebre del heno. Tomar cápsulas de leche de yegua con regularidad puede ofrecer apoyo desde el interior, reduciendo la gravedad de las reacciones alérgicas.
Asma
El asma, una inflamación crónica de las vías respiratorias, a menudo se correlaciona con alergias. Si bien los medicamentos pueden controlar los síntomas, no curan la afección. La leche de yegua puede ayudar al atacar el sistema inmunológico debilitado. Al favorecer una flora intestinal equilibrada, la leche de yegua ayuda a optimizar el equilibrio de sustancias del cuerpo, permitiéndole reaccionar menos violentamente a los alérgenos del aire, como el polen o el polvo.
Si sufre de alergias, las cápsulas de leche de yegua pueden ser un tratamiento complementario a su plan de tratamiento actual. Para obtener resultados óptimos, se recomienda utilizar las cápsulas Equilac durante tres meses consecutivos.